Fuenlabrada fue la primera ciudad que aprobó en 1997 el Reglamento del Voluntariado, del que se celebra este martes su Día Internacional, y cuyo fin es reconocer la labor que llevan a cabo los voluntarios y regularla. A día de hoy son más de un centenar los voluntarios que ayudan en nuestra urbe de manera altruista. Entre sus labores, dedican su tiempo libre a tareas de acompañamiento en el domicilio, paseo a personas mayores o realizar gestiones, visitas al médico o actividades de ocio y tiempo libre con personas dependientes.

Este Reglamento del Voluntariado sirve «para trabajar de manera conjunta y sensibilizar a la población de la importancia social de esta labor», explica la concejala de Bienestar Social, Carmen Bonilla. Los colectivos que requieren el trabajo del voluntario pueden ser: mayores, discapacitados físicos, intelectuales o sensoriales, drogodependientes en fase de recuperación o inmigrantes.

El perfil de los voluntarios fuenlabreños es muy variado ya que sus edades oscilan entre los 18 y más de 70 años y tienen un nivel académico diferente. «Las personas que deciden unirse eligen las tareas a realizar en función de las necesidades y del horario que tienen disponible», comenta la edil responsable del área.

Según ha explicado la concejala, para desarrollar estas tareas es imprescindible tener más de 18 años, «querer trabajar en equipo, conocer y cumplir el Reglamento de Voluntariado de Servicios Sociales y ser responsable con los compromisos adquiridos».

Además, la edil ha adelantado que la Comunidad de Madrid va a reconocer próximamente al Ayuntamiento, quien organiza periódicamente cursos de formación para este colectivo, por su Programa de Voluntariado dentro de un acto conmemorativo del Día Internacional.

Texto: Prensa Ayuntamiento de Fuenlabrada/Redacción

Foto: modelocurriculum.net